TRANSMITIR PRH

PRH Ibérica

Sáb, 10/01/2022 - 11:19

Transmitir de forma eficaz PRH a personas en búsqueda requiere concederles a ellas un papel central en la transmisión: escucharlas a fondo, tratar de responder a sus aspiraciones o necesidades y hacerlo de forma adaptada a ellas. También ayuda creer profundamente en lo que se dice, y no estar centrado en agradar sino en ser uno mismo. El testimonio de André Rochais, accesible a través de entrevistas que le hicieron grabadas en video, puede estimularnos a avanzar en estas actitudes.

Un tema que suele interesar a la mayoría de los colaboradores y voluntarios de PRH es cómo hablar de PRH de forma eficaz y ajustada. Hace aproximadamente un año, como voluntario y habilitado para la relación de ayuda, tuve ocasión de vivir justamente un taller sobre este asunto. Aprovecho la oportunidad que me brinda el blog PRH para compartiros lo esencial que aprendí en él.

Una primera observación que me ayudó es que no es lo mismo hablar de PRH a quienes me preguntan porque tienen curiosidad sobre mí (dónde voy, qué hago ese fin de semana, etc.), que hablar de PRH a alguien que está en búsqueda, que tiene hambre de crecer o de ser más él mismo en sus relaciones. Es particularmente a estos últimos a los que nos dirigimos cuando queremos transmitir PRH.  

En ese contexto de relación con alguien en búsqueda, el punto más importante que me quedó del taller fue conceder al otro un lugar central en la transmisión. ¿En qué consiste eso?:

  • En primer lugar, consiste en escucharle en profundidad: ¿qué inquietudes tiene? ¿Cuál es su problemática? ¿qué es importante para él?... Puedo incluso formularle alguna pregunta que le dé oportunidad de expresarse más a fondo en su vivencia, de modo que yo pueda conocer mejor a esa persona.  
  • Como consecuencia, en mis intervenciones no estaré centrado en colocar un “producto” o en decir frases hechas sobre PRH, sino en tratar de responder a las aspiraciones o necesidades de la persona, dejando caer mis deseos o mis propias expectativas.  
  • Mi mensaje ha de ser desde luego un mensaje positivo, de esperanza, en el que yo crea profundamente, claro, sencillo y concreto. Pero también ha de ser un mensaje adaptado a mi interlocutor: por ejemplo, evitando frases o palabras del lenguaje PRH que pueda eventualmente no entender o que puedan incluso causarle rechazo porque no forman parte de su lenguaje cotidiano. Así, suele ser más adaptado decir tu mente en lugar de tu yo-cerebral; o decir tu esencia o lo mejor de ti en lugar de tu ser.

Para mí, André Rochais es una referencia como transmisor y divulgador de PRH.  Cada vez que he tenido ocasión de verlo en algún video, me llama la atención su naturalidad, su espontaneidad, la seguridad que transmite, propia de alguien que encarna y cree profundamente en lo que dice; incluso cierto sentido del humor. Habla también con su cuerpo, sin timidez ni vergüenza; se le nota que no está pendiente de agradar o de caer bien, sino de ser él mismo. Se le percibe auténtico. En sus respuestas no utiliza fórmulas preelaboradas, sino que se aprecia que, tras escuchar la pregunta que le formula su interlocutor, busca la respuesta en su interior. Confrontándonos con este modelo, los colaboradores podemos abrirnos a recibir una invitación a progresar en algún  punto en nuestra forma de transmitir PRH.

Bernardo.


Comentarios

Lola Munilla
3 Julio 2024
Muy bueno Bernardo, me has dado buenas pistas.

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